Tomar medidas para evitar accidentes de tráfico en la carretera está a nuestro alcance para proteger nuestra seguridad y la del resto de usuarios de la vía.
¿Cuántas veces se nos olvida cuando salimos a la carretera pensar que conducir es un riesgo, y que debemos extremar las medidas de precaución en todo momento?
Es cierto que, para muchos de nosotros, conducir es una actividad que hacemos de forma automática, sobre todo cuando “practicamos” a diario (por ejemplo, quien va a trabajar todos los días en coche o en moto).
Pero bajar la guardia y confiarnos es el mayor error que podemos cometer.
No se trata de conducir con miedo, pero sí de tener siempre en cuenta que estamos expuestos en todo momento a sufrir un accidente, y, por tanto, debemos hacer todo lo que esté en nuestra mano para evitar situaciones de riesgo en la carretera.
Sabemos, como abogados especialistas en accidentes de tráfico https://demandatulesion.com/abogado-accidente-de-trafico-contratar-abogado/, y la experiencia que tenemos con nuestros clientes desde hace más de 10 años, que la mayoría de los siniestros que se producen ocurren por fallos humanos.
Conocer cómo evitar accidentes en la carretera puede ayudarnos a dejar de conducir en “piloto automático” y tener muy presentes las medidas mínimas a adoptar para evitar poner en peligro nuestra integridad física y la de los demás usuarios de la vía.
ACCIDENTES EN CARRETERA: FACTORES DE RIESGO QUE SIEMPRE OLVIDAMOS
La vida estresante que llevamos en el día a día no nos deja tiempo para pensar, muchas veces, en cómo hay gestos tan cotidianos como conducir que conllevan situaciones de riesgo y peligro que no tenemos en cuenta ni valoramos.
Muchas de nuestras conductas más sencillas pueden influir de manera determinante en incrementar las posibilidades de sufrir un siniestro, y estas son las más habituales que nos deben hacer pensar:
SIEMPRE TENEMOS PRISA

No nos engañemos, nuestro ritmo de vida en el día a día es tan ajetreado como estresante.
Enfrentarse a los atascos matutinos para ir a trabajar, las caravanas eternas en los accesos a las grandes ciudades, o las retenciones habituales en puentes y vacaciones, nos ponen de los nervios.
Si a ello le unimos la impaciencia y las prisas por llegar a nuestro destino, ya tenemos la primera situación de riesgo que, a veces sin querer, pueden provocarnos cometer un error que derive en un accidente de tráfico.
La urgencia por llegar a una cita de trabajo, o a un destino vacacional, o lo que es lo mismo, circular mirando el reloj, es el primer enemigo de la seguridad vial.
Nos olvidamos de que lo más importante siempre es llegar a nuestro destino.
LLEVAMOS UNA VIDA ESTRESANTE
¿Cuántas veces hemos perdido los nervios al volante?
El estrés nos juega malas pasadas en todos los ámbitos de nuestra vida, pero coger un coche o una moto estando cansados, estresados o agobiados puede desencadenar reacciones nada buenas cuando se está circulando, y menos en la carretera donde hay que conducir con los cinco sentidos.
Si a ello le unimos la facilidad que tenemos para perder la paciencia, el resultado puede ser un accidente de circulación.
CADA VEZ UTILIZAMOS VEHÍCULOS MÁS POTENTES
Un coche o una moto de gran cilindrada es una tentación para cualquiera. Y salir a la carretera a desafiar los límites de velocidad es tan habitual como peligroso.
Todos hemos visto alguna vez cómo nos adelantan estos vehículos tan potentes que circulan tan rápido que casi ni los vemos.
Y es que parece que la conducción deportiva se ha puesto de moda para algunos conductores, que circulan pensando que nuestras carreteras con un circuito de velocidad.
El peligro es evidente, los riesgos se multiplican y la posibilidad de sufrir un accidente no solo está ahí para los conductores que no respetan esos límites, sino también para todos los demás usuarios de la vía que circulamos correctamente.
LA FALSA SEGURIDAD DE PENSAR QUE «CONTROLAMOS»
Una actitud muy habitual tanto en conductores con experiencia como en jóvenes noveles es pensar que “nunca pasa nada”.
Confiarnos al volante es un error que se acompaña de esa creencia tan extendida que se basa en dar por hecho que nunca vas a tener un percance, ni por tu culpa, ni por la de los demás.
Esa sensación de falsa seguridad lleva a muchos usuarios de la vía a circular de manera imprudente o lo que es peor, cometiendo infracciones tan graves como hacerlo bajo la influencia del alcohol o las drogas.
No hace falta insistir de que, en estos casos, aparte de que puede constituir un Delito circular con alcohol o drogas en el cuerpo, y las sanciones o incluso penas que conlleva, las posibilidades de provocar un siniestro se multiplican.
Y no hay que olvidar que, además, en estos casos te va a tocar hacerte cargo personalmente de indemnizar los daños personales y materiales a todas las víctimas del accidente que hayas provocado.
NOS FALTA MUCHA EDUCACION VIAL
Qué duda cabe que las normas de circulación no están de adorno, y son para cumplirlas.
Muchos conductores circulan, no solo sin respetarlas, sino también en un desconocimiento absoluto sobre cómo actuar en el ámbito de la circulación vial, por su propia seguridad y por la de los demás.
Y la prueba está en tantos siniestros que se producen por infracciones tan simples como saltarse un STOP o un Ceda el paso, no respetar los límites de velocidad en las carreteras, o adelantar de forma indebida, por no hablar del total desconocimiento sobre cómo incorporarse o circular dentro de una rotonda.
No basta con sacarse el carnet de conducir y lanzarse a la carretera. Ni tampoco vale confiarse cuando nunca te ha pasado nada en todos los años que llevas conduciendo.
Un simple error de segundos, una falta de atención a las señales, un incumplimiento de una norma de circulación, y el accidente de tráfico lo tienes asegurado.
EL ERROR DE NO REVISAR NUESTRO VEHICULO… ¿PARA QUE?
Podemos ser muy cuidadosos con otros aspectos de nuestra vida, pero cuando se trata de revisar y poner a punto nuestro vehículo antes de emprender un viaje, parece que se nos olvida o no le damos ninguna importancia.



No mantener nuestro vehículo en las debidas condiciones también es una imprudencia.
Unas ruedas desgastadas, unos frenos sin revisar, luces rotas, o un limpiaparabrisas defectuoso son ya de por sí, elementos de riesgo en una conducción segura.
QUE PUEDES HACER PARA EVITAR ACCIDENTES DE TRAFICO EN CARRETERA
Sabiendo que la inmensa mayoría de los accidentes de tráfico se producen por errores humanos, es lógico pensar que, si todos ponemos de nuestra parte para evitar riesgos en la conducción, es casi seguro que la siniestralidad se reduciría de forma importante.
La mayoría de las soluciones las conocemos todos, ahora lo que falta es entender y asimilar que no son una opción, sino que deberían ser una obligación para todos los que conducimos, desde el novel que empieza hasta el conductor más veterano.
Repasamos las pautas más importantes que podemos hacer para evitar accidentes de tráfico en la carretera:
LA VELOCIDAD EN CARRETERA, EL NUMERO 1 DE LOS RIESGOS
Es muy fácil circular por carretera sin respetar los límites de velocidad.
Que levante la mano quien no ha conducido nunca por encima de esos límites…. Pocos o muy pocos, estamos seguros porque en DEMANDA TU LESION son muchos los casos de siniestros que hemos tramitado donde la velocidad ha sido un elemento determinante en el resultado lesivo.
Parece que no nos damos cuenta de cómo se multiplican los riesgos si circulamos por encima de la velocidad permitida en vías interurbanas.
Cuando las señales nos advierten de que debemos circular a una determinada velocidad en la carretera es por algo, desde curvas peligrosas, hasta tramos que requieren de más atención o cuidado.
La velocidad está detrás de muchos siniestros, en la mayoría de los casos graves y con importantes daños materiales y personales.
PLANIFICAR EL VIAJE
Siempre que se sale a carretera es muy importante planificar bien el viaje, lo que ahorra inconvenientes posteriores.
Conocer la ruta de antemano, saber si hay tramos en obras o en malas condiciones tanto en la propia carretera como por las condiciones meteorológicas, elegir un itinerario más fluido o donde haya menos congestión, o incluso menos peligroso, son pasos básicos para ayudarnos a tener un buen viaje.
DETENERSE A DESCANSAR TAMBIEN ES NECESARIO
Olvídate de las prisas y déjalas en casa antes de viajar. Lo importante no es salir, sino llegar sanos y salvos a nuestro destino.
Tanto si viajas solo como si es en compañía, es importante parar para descansar, cada 200 kilómetros o cada dos horas
No hace falta que insistamos en la importancia de hacerlo cuando vas con niños, cuando sientes cansancio al volante o cuando te entra sueño.
Un error por conducir un largo periodo de tiempo sin detenerte puede costarte la vida, a quienes te acompañen y a otros usuarios de la vía.
LA DISTANCIA DE SEGURIDAD: EVITA RIESGOS INNECESARIOS
En nuestro país la tendencia a circular sin respetar la distancia de seguridad está a la orden del día.
Muchos accidentes se producen por este motivo, tanto en vías urbanas como interurbanas, y uno de los principales peligros de no cumplir esta norma está detrás de los accidentes con ciclistas que circulan por el arcén en las carreteras, que siempre se llevan la peor parte.
Mantener la distancia de seguridad con el vehículo que nos precede evitaría muchos siniestros, en especial en atascos, retenciones, o a la hora de reaccionar frente a cualquier imprevisto que nos podamos encontrar en la vía y que obligue a frenar bruscamente al vehículo que llevamos delante.
CERO DISTRACCIONES: CUIDADO CON LOS MOVILES
A estas alturas todo el mundo sabe que un importante porcentaje de la siniestralidad en nuestro país se debe al uso indiscriminado de los móviles al volante.
Y no es para menos. Las cámaras de la DGT han pillado a muchos conductores cometiendo esta infracción que está detrás de muchos accidentes de tráfico.
Y no solo es por la sanción que te puede caer si te pillan, que también. Es, sobre todo, porque una pequeña distracción de pocos segundos puede costarte la vida.
EL TOPICO QUE HAY QUE GRABARSE A FUEGO: SI BEBES NO CONDUZCAS
No nos cansaremos de repetir hasta la saciedad la importancia de no ponerse al volante habiendo consumido drogas o alcohol.
Tampoco hace falta recordar hasta qué punto tus facultades se ven mermadas cuando circulas con alcohol o drogas en el cuerpo.
Y no valen las clásicas excusas del tipo “yo controlo”, “total solo son unas cervezas” o “no pasa nada porque vivo muy cerca”.
Y si ya se trata de circular por carretera, el riesgo de provocar un accidente se multiplica.
A veces será una infracción administrativa que conlleva sanción, pero otras veces será un delito tipificado en el Código Penal y que puede acarrearte antecedentes penales, pérdida del carnet, multa y hasta pena de cárcel, según el caso.
Pero eso no es lo peor. Si provocas un siniestro y causas daños tendrás que responder personalmente de ellos con cargo a tu patrimonio.
Y muchas indemnizaciones por este motivo han provocado la ruina económica de infractores inconscientes que pensaban que conducir bebido no tenía mayores consecuencias.



¿QUE PASA CON LOS FACTORES DE RIESGO QUE NO ESTAN A NUESTRO ALCANCE Y NO PODEMOS EVITAR?
Es evidente que evitar accidentes de tráfico en carretera no siempre está en nuestra mano.
Conducir siempre entraña un riesgo, por mucho cuidado que pongamos y muchas precauciones que adoptemos.
Y hay algunos factores que no podemos evitar, pero sí debemos tener en cuenta cada vez que nos ponemos al volante:
EL MAL ESTADO DE LAS CARRETERAS
Sabemos que parte de la red viaria en nuestro país deja bastante que desear.
Y aunque planifiquemos el viaje, a veces nos podemos encontrar con obstáculos que no conocíamos, tramos en mal estado, obras, pavimento agrietado, socavones o baches, y un sinfín de problemas más relacionados con el mal estado de la carretera.
¿La solución? Extremar la precaución y conducir con cuidado, sobre todo cuando nos encontremos con tramos defectuosos.
La climatología
Las circunstancias meteorológicas adversas no son un buen compañero de viaje.
Conducir con lluvia, nieve, granizo o viento puede convertirse en una odisea para el conductor, pero también en un potencial peligro de cara a sufrir percances inesperados que pueden quedar en un susto o accidentes más graves.
Para evitar situaciones de riesgo hay que prevenir. Es preferible posponer el viaje si la climatología es demasiado adversa, y en caso de tener que salir, asegurarte de llevar todo lo necesario para hacer frente a cualquier eventualidad.
Lo que hacen los demás en carretera
Es evidente que queda fuera de nuestro alcance lo que el resto de usuarios de la vía realicen en el ámbito de la circulación.
Y también está claro que no podemos prever cómo se van a comportar otros conductores ante una situación de riesgo, un potencial peligro, o cualquier obstáculo que surja en la carretera.
Esto es lo que, por desgracia, ocurre cuando eres víctima de un siniestro y no es culpa tuya.
Porque por mucho cuidado que tengas siempre puedes verte involucrado en un accidente donde la responsabilidad es de un tercero.
En este caso, eres tú el perjudicado frente a la falta de diligencia y deber de cuidado en la conducción de los demás.
Si es así, ya sabes que puedes reclamar la indemnización que te corresponda por los daños personales y materiales que hayas tenido, aunque en DEMANDA TU LESION ya sabemos lo difícil que resulta reclamar en muchas ocasiones y las dificultades que puedes encontrarte.
Si es tu caso y necesitas asesoramiento, resolver dudas, o saber si puedes reclamar por los perjuicios sufridos, podemos ayudarte.
Contacta con DEMANDA TU LESION y nuestros abogados te harán un diagnóstico gratuito y sin compromiso de tu caso.