¿Por qué se consideran algunos accidentes como peligrosos o graves y otros no?
Es evidente que verse involucrado en un siniestro es ya de por si una experiencia traumática para la mayoría de las víctimas, incluso cuando es leve y no tiene mayores consecuencias que el susto.
Pero no hay duda que hay una serie de factores que influyen en la dinámica del accidente y que normalmente van a provocar mayores consecuencias lesivas.
Las estadísticas nos lo indican cada año, y es que la mayoría de los siniestros se producen por errores humanos.
Si a ello le añadimos los factores de riesgo que en toda conducción nos podemos encontrar, el resultado se traduce en un aumento de la siniestralidad.
¿QUE INFLUYE EN QUE UN ACCIDENTE SEA PELIGROSO O GRAVE?
La teoría nos la sabemos perfectamente.
Pero son pocos los conductores que cada vez que se ponen al volante recuerdan la importancia de extremar las medidas de precaución y cuidado.
Sin embargo, podemos pensar que normalmente los accidentes más espectaculares desde un punto de vista de daños materiales siempre son graves, y viceversa, y aunque sea lo habitual, no en todas las ocasiones es así.
Por ejemplo, en DEMANDA TU LESION hemos asistido a las víctimas de un siniestro en carretera con vuelco donde a pesar de lo aparatoso del mismo, no hubo lesiones de gravedad.
Y también tramitamos un caso de un conductor que por un despiste se salió de la carretera sin mayores consecuencias para el vehículo que no tuvo daños, pero que provocó a la ocupante una lesión medular que la dejó en silla de ruedas al golpearse la cabeza contra el techo del mismo.
La mayor o menor peligrosidad o gravedad, por tanto, no es igual en todos los casos, y por eso es tan importante analizar en cada supuesto concreto las circunstancias que han influido en el desarrollo del siniestro para determinar las responsabilidades derivadas del mismo.
ACCIDENTE PELIGROSO O GRAVE: LOS CASOS MAS COMUNES
Salvo 2020, un año en el que a consecuencia de la crisis sanitaria provocada por el Covid19 y el confinamiento que tuvimos se redujo a mínimos históricos la siniestralidad vial, si miramos hacia atrás comprobamos que siempre se repiten un mismo tipo de accidentes que sea por los factores que los provocan o por la entidad de los daños que resultan del mismo, están en primera línea de peligrosidad o de gravedad.

LOS SINIESTROS EN CARRETERAS CONVENCIONALES
Los accidentes que se producen en las carreteras convencionales siguen estando a la cabeza en cuanto a peligrosidad, y también suelen provocar lesiones graves, llegando a provocar casi el 80% de las víctimas mortales que se producen en vías interurbanas.
¿Y por qué son más peligrosas?
-Tienen un solo carril en cada sentido, es decir, no están desdobladas como una autovía o una autopista.
-Se encuentran normalmente en peor estado de conservación.
-Las intersecciones y las incorporaciones se encuentran al mismo nivel.
-Tienen trazados más peligrosos: curvas, zonas de montaña, peor visibilidad…
Este tipo de vías secundarias son doblemente más peligrosas que las autovías y autopistas y provocan un mayor número de heridos graves o muy graves y fallecidos.
Los tipos de siniestros más habituales que se producen en carreteras convencionales o secundarias son las salidas de la vía y los choques frontales.
LOS CHOQUES FRONTALES
Si hay un accidente peligroso es el que ocurre cuando dos vehículos colisionan frontalmente, y de hecho es, según las estadísticas, uno de los que mayor número de fallecidos deja en las carreteras.
Un 23% de los siniestros producidos en 2019 en nuestro país lo fueron por choques frontales.
Las consecuencias de este tipo de accidente siempre se traducen en daños materiales muy importantes y lesiones o daños personales graves o muy graves.
Esto convierte este tipo de casos en reclamaciones complejas y largas en el tiempo, y para las que es muy importante contar siempre con ayuda legal especializada, porque en ocasiones requiere de informes de peritos reconstructores de accidentes para determinar la responsabilidad.
LAS SALIDAS DE LA VIA
Los accidentes con salida de la vía siguen siendo de los más peligrosos y también provocan en la mayoría de los casos daños graves tanto materiales como personales, siendo muy habituales en carreteras convencionales.
No siempre este tipo de siniestros se deben a las condiciones de la propia carretera, como pueden ser los socavones y baches o el firme irregular.
De hecho, en muchas ocasiones, son los errores humanos los que provocan la salida de la vía, por distracciones, exceso de velocidad o utilización del móvil o cualquier otro dispositivo electrónico.
El alcohol y las drogas al volante están también detrás de muchos accidentes que desembocan en una salida de la vía.
LAS COLISIONES MULTUPLES
Otro tipo de accidente que se puede considerar peligroso son los choques en cadena, llamados también colisiones múltiples, caracterizados porque en ellos intervienen tres o más vehículos.
Podemos decir que son peligrosos porque es fácil verse involucrado en un alcance de este tipo, sobre todo en las clásicas retenciones de tráfico o atascos, si bien cuando son a poca velocidad no suelen provocar daños excesivamente graves.
Sin embargo, en otras ocasiones las consecuencias pueden ser más graves, por ejemplo, cuando hace unos años se produjo una colisión en cadena de más de 50 vehículos en Galicia a causa de la niebla.
Normalmente si el choque en cadena se produce interviniendo la alta velocidad, aumenta la peligrosidad y aumentan los daños.
Los problemas derivados de este tipo de accidentes vienen determinados por los conflictos entre las aseguradoras de los vehículos involucrados, para determinar quién se tiene que hacer cargo del pago de los daños tanto materiales como personales sufridos por los implicados.



LOS ACCIDENTES CON MALAS CONDICIONES CLIMATOLOGICAS
Todos sabemos que conducir con nieve, lluvia intensa, hielo o viento fuerte es peligroso, y muchos accidentes provocados por la mala meteorología causan daños graves tanto a los vehículos como a las personas.
Cuando no queda más remedio que conducir en estas condiciones desfavorables, somos los conductores quienes debemos extremar las precauciones, reduciendo la velocidad, aumentando la distancia de seguridad entre vehículos y evitando distracciones.
Este tipo de siniestros se consideran peligrosos porque pueden afectar a varios vehículos y los daños pueden ser muy graves sobre todo si se producen en vías interurbanas.
LOS ATROPELLOS POR CRUZAR POR LUGAR INDEBIDO
Los atropellos siempre suelen ser accidentes graves porque el peatón se encuentra desprotegido, y no son esperados cuando el peatón está cruzando correctamente un paso de peatones.
Pero en ocasiones el peligro viene dado porque se cruza por lugar indebido, lo que ya de por si supone una actitud peligrosa por parte del peatón, que, no obstante, no exime totalmente de responsabilidad en muchos casos a los conductores.
Son accidentes peligrosos porque las estadísticas nos demuestran que sigue habiendo un número importante de fallecidos en atropellos, sobre todo los que se producen de noche.
Y son graves por las lesiones de las víctimas de un atropello que siempre son importantes, lo que implica reclamaciones de indemnizaciones elevadas y conflictos con las aseguradoras que tiene que pagar, que pueden poner muchas pegas sobre todo si hay dudas sobre la culpabilidad.
LOS ACCIDENTES PROVOCADOS POR DISTRACCIONES
Todos sabemos que las distracciones al volante provocan accidentes. Y, sin embargo, en nuestro país se siguen produciendo muchos siniestros por este motivo. A la cabeza, el uso de teléfonos móviles, GPS y otros dispositivos electrónicos.
Los consideramos peligrosos porque las consecuencias de estas distracciones no son solo para quien está cometiendo la infracción, sino también se está poniendo en peligro al resto de usuarios de la vía.
Una prueba de ello es que basta una distracción de escasos segundos mirando el móvil mientras se circula por una carretera secundaria para invadir el carril contrario y chocar de frente con otro vehículo que circula correctamente.
EL PELIGRO DEL EXCESO DE VELOCIDAD
Un accidente peligroso y grave es el prototipo de supuesto que se produce por circular con exceso de velocidad.
Está claro que la velocidad multiplica las posibilidades de tener un siniestro grave, y que es mucho más peligroso conducir a gran velocidad que hacerlo dentro de los límites permitidos.
Las estadísticas así lo demuestran, y es que conducir por encima de la velocidad recomendada o de los límites que se nos indican nos hace perder reflejos, capacidad de reacción y dominio del vehículo ante cualquier situación que pueda surgir en la conducción.
En este caso peligro y gravedad van de la mano, porque la velocidad incrementa el peligro, y un accidente de este tipo conlleva lesiones y daños de mucha mayor gravedad.
ACCIDENTE PELIGROSO Y GRAVE DESDE EL PUNTO DE VISTA DE LAS LESIONES
Ya sabemos que peligro y gravedad son conceptos que suelen ir unidos en la mayoría de los casos, pero que hay excepciones, accidentes que pese a su espectacularidad no revisten daños demasiado graves y viceversa, casos aparentemente leves que sin embargo provocan lesiones muy graves.
Un accidente se considera grave desde el punto de vista de los daños cuando estos son de una entidad importante, y hablamos tanto de los materiales como de los personales.
Evidentemente, no es lo mismo un golpe de chapa sin importancia en un alcance trasero estando detenido en un semáforo, que un siniestro total.
Y tampoco es lo mismo sufrir un esguince cervical que una fractura de cadera o la amputación de una extremidad.
La mayor o menor gravedad de esas lesiones determinará la indemnización que la víctima pueda reclamar a la aseguradora del responsable, y que en siniestros especialmente importantes, dispara la cuantía de las cantidades a pagar, sobre todo cuando se trata de grandes lesionados o fallecidos.
Desde DEMANDA TU LESION insistimos en la importancia de que la víctima se asesore siempre con abogados especialistas en accidentes.
Y no es solo porque sin información y desconociendo la normativa es muy difícil reclamar con garantías a la compañía, que defiende su propio interés, no el del perjudicado.
También es porque en un accidente peligroso o grave son muchos los conceptos que hay que reclamar, las lesiones suelen dejar secuelas importantes, y todos los factores de corrección recogidos en el Baremo deben valorarse para aplicar en la indemnización.
Si tú o alguien de tu entorno sufre un siniestro grave, podemos ayudarte.
Contacta con DEMANDA TU LESION para informarte y recibir una valoración inicial sin compromiso con nuestros abogados.