La rehabilitación en un accidente
de tráfico es fundamental, no solo para recuperarte, sino también para la
valoración y cálculo de la indemnización
por secuelas.
Cuando sufres un siniestro y
tienes daños personales, necesariamente vas a tener que realizar un tratamiento
médico encaminado a curarte las lesiones.
La rehabilitación es absolutamente necesaria en este proceso, en el
que, en mayor o menor medida, y atendiendo a los daños sufridos, tendrás que
invertir un tiempo que se alargará más o menos en función de la gravedad de las
lesiones.
Pero un tratamiento rehabilitador
va mucho más allá. Porque habrá veces que, gracias al mismo, conseguirás
recuperarte satisfactoriamente y casi del todo.
Pero en otras ocasiones, tendrás
una mejoría, pero no completa, y cualquier dolor o limitación que tengas después de acabar el tratamiento se traduce
en las secuelas funcionales que van a quedarte y que tienen que
indemnizarte la compañía de seguros.
Sin rehabilitación en un proceso de curación por lesiones
derivadas de un siniestro, es muy difícil que la compañía te pague una
indemnización, pues entienden que no ha habido
un proceso curativo y que solo has necesitado una primera asistencia médica.
Empezarla tarde, o fuera de los
plazos establecidos en la normativa, también puede provocar que la aseguradora
no quiera pagarte cantidad alguna.
Y el informe final del
tratamiento, es el punto de partida para reclamar secuelas.
No es fácil gestionar esta parte
del proceso de reclamación de daños derivados de un accidente, porque tu falta
de información como víctima puede conducirte a cometer errores de gestión o de tiempos que provoquen que la aseguradora no
quiera pagarte.
Por eso, la ayuda de un abogado
especialista en accidentes de tráfico se convierte en la mayor garantía
para un lesionado, que va a saber qué debe hacer y cómo hacerlo, no solo para
recuperarse cuanto antes y de la mejor manera, sino también para reclamar la
indemnización que le pueda corresponder.
IMPORTANCIA DE LA REHABILITACION TRAS UN
ACCIDENTE DE TRAFICO
La inmensa mayoría de los daños
personales derivados de un siniestro van
a requerir tratamiento rehabilitador.
En los casos más leves, como son
las lesiones en la columna vertebral, por ejemplo, el esguince cervical, la
dorsalgia o la lumbalgia, y que en mayor o menor medida sufren casi todos los
perjudicados, el tratamiento
rehabilitador puede ayudar a recuperarse casi por completo al lesionado.
En casos más graves, como puede ser una fractura, la rehabilitación es más larga en el tiempo, y aunque mejore la situación de la víctima, en casi todos los casos van a quedar secuelas, que luego deben reclamarse a la aseguradora.

En cualquier caso, un tratamiento
rehabilitador cumple una doble misión: la primera y más importante, es ayudarte en tu proceso curativo. No
cabe duda que, por encima de cualquier cosa, la víctima busca mejorar de sus
daños y tratar de recuperarse lo más posible.
Pero también la rehabilitación es fundamental para el
proceso de reclamación de la indemnización que te pueda corresponder, tanto
en la valoración del cómputo de días que has tardado en recuperarte, como en la
de las secuelas funcionales que te puedan quedar cuando termines el
tratamiento.
TRATAMIENTO REHABILITADOR: PLAZOS
El tratamiento rehabilitador está condicionado
por unos plazos, que, si no conoces o incumples, puede provocarte que la
compañía de seguros no quiera pagarte indemnización.
Lo más
habitual, sobre todo en los casos más leves como una cervicalgia o una dorsalgia
postraumática, es que comiences la
rehabilitación en el plazo de los 15 días posteriores al siniestro,
pudiendo realizarlo sin coste alguno para ti si lo gestionas en ese tiempo a
través de tu compañía de seguros, que te cubre la asistencia sanitaria.
A través del denominado Convenio UNESPA, podrás elegir cualquiera
de los centros adheridos al mismo y recibir el tratamiento rehabilitador
cuanto antes, sin tener que ocuparte de nada más porque los gastos derivados
del mismos son cubiertos por la compañía.
Los plazos para comenzar la rehabilitación se demoran en el caso de los
lesionados más graves, porque, como es lógico, la entidad de los daños
requiere periodos de inmovilización, de Hospital o de reposo más largos de los
15 días que se indican como tiempo para comenzar el tratamiento.
En estos supuestos no puedes
comenzar el tratamiento con ese margen, pudiendo hacerlo posteriormente siempre
que esté acreditado en los informes
médicos el momento a partir del cual el traumatólogo te indica que ya
puedes empezar el tratamiento.
¿CÓMO INFLUYE LA REHABILITACION EN EL CALCULO
DE LA INDEMNIZACION?
La indemnización
por lesiones derivadas de un siniestro
incluye, entre otros conceptos, la valoración del periodo de curación que has
requerido para restablecerte, y las posibles secuelas funcionales o estéticas
que te quedan cuando recibes el alta médica.
La rehabilitación que realices va a influir en el cálculo de ambos
conceptos: periodo de curación y secuelas.
REHABILITACION PARA CALCULAR TU PERIODO DE CURACION
Este periodo abarca desde la fecha del accidente hasta que
recibes el alta por estabilización lesional.
Esto significa que, si en tu caso
has realizado rehabilitación durante 45 días, ese periodo tiene que computarse
como curativo, e incluirse dentro del cálculo de tu periodo de
restablecimiento.
Ahora bien, esto no es tan
sencillo.
A veces la rehabilitación requiere varios periodos de tratamiento
alternos, en función de las lesiones que
has tenido, y la aseguradora no quiere computarlos todos.
En otras ocasiones, cuando los
daños son más leves, las compañías de
seguros no quieren pagarte la totalidad de tu tiempo de rehabilitación
porque considera que son demasiados días teniendo en cuenta la media
estadística que tarda en curar esa lesión (esto ocurre mucho en los
traumatismos menores de columna vertebral).
En DEMANDA TU LESION sabemos que cada lesionado es distinto a los demás,
y que no puede generalizarse en ningún caso, porque el mismo daño puede
requerir periodos de curación distintos atendiendo a las circunstancias
personales y antecedentes médicos de cada uno.
Por ejemplo, no necesita el mismo
número de sesiones un adolescente de 15 años que sufre un esguince cervical y
que seguramente se va a recuperar del todo, que su madre, con 45 años, que
tiene antecedentes de patologías previas en el cuello y necesitará más
tratamiento rehabilitador.
REHABILITACION PARA CALCULAR INDEMINIZACION POR SECUELAS FUNCIONALES
La secuela
funcional es todo aquel dolor o limitación que le queda a la víctima una vez
termina el tratamiento prescrito por su médico y recibe el alta por
estabilización lesional.
Los informes de rehabilitación son el documento fundamental que necesitas para poder acreditar que esa secuela existe y, por tanto, debe ser indemnizada.



Lo habitual es que a lo largo de tu tratamiento rehabilitador seas revisado por el traumatólogo de manera periódica para ir comprobando tu evolución, y en función de la misma, este se alargue más o menos.
Hay lesiones que requieren procesos más largos y otras que curan
con mayor facilidad.
Cuando tu médico considera que ya has agotado las posibilidades terapéuticas de mejorar más con la rehabilitación, te dará el alta por estabilización.
Y es entonces cuando debe recoger en su informe final que a la fecha del alta te ha quedado ese dolor o limitación que antes del siniestro no tenías, y que es la secuela que tienes que reclamar.
Dicho de otro modo: ya puedes
insistir a la aseguradora que te duele o que estás limitado con todos los
argumentos que quieras, que mientras no haya un informe médico que lo acredite,
no te van a pagar cantidad alguna por ello.
Y, es más, algunas compañías no abonan cantidad alguna por secuelas, aunque haya
un informe médico que lo diga, en especial en los traumatismos menores de columna vertebral, donde con casi total
seguridad, te vas a encontrar con que ni te las reconocen, ni te las pagan.
Por eso es muy importante no solo
que te asegures de que el informe de
alta en rehabilitación haga especial hincapié en las secuelas que te hayan
quedado, sino que cuentes con la
ayuda de un abogado especialista que te indique qué tipo de documentos
debes pedir y si las mismas están bien
acreditadas para reclamarse, sea en vía amistosa o en vía judicial si la
aseguradora no quiere abonarlas por las buenas.
OPCIONES PARA HACER REHABILITACION ¿QUIEN PAGA
PARA HACER EL TRATAMIENTO?
Si decides realizar el tratamiento
a través de tu compañía de seguros, puedes hacerlo sin coste alguno en
cualquiera de los Centros adheridos al
Convenio Unespa.
Sin embargo, esta opción no
siempre es posible: puede que tu aseguradora no esté adherida al Convenio, o
que necesites un tipo de tratamiento especial, en cuyo caso tendrás que costearte la rehabilitación por tu cuenta y
luego reclamar su importe a la compañía de seguros.
Si has sufrido un atropello,
puedes igualmente acudir a un centro adherido al Convenio si la compañía del
vehículo que te ha atropellado está adherida al mismo, y será ésta quien se
haga cargo de los gastos de tu rehabilitación.
INFORME DE REHABILITACION Y SECUELAS
La única manera de conseguir que
se te valoren las secuelas derivadas de
un siniestro y te las paguen, es demostrar documentalmente que las tienes.
En la exploración física el médico va a constatar que tienes ese dolor o limitación
funcional que es la secuela que tienes que reclamar.
La postura de las compañías de seguros con las secuelas
En otros post hemos hablado de que
las aseguradoras ponen especiales
dificultades en la valoración y pago de las secuelas derivadas de lesiones
en un accidente de tráfico, y en caso de reconocerlas, siempre las van a
valorar en mínimos para pagar menos indemnización.
Esto obliga a la víctima a
asegurarse de que cualquier secuela que
le quede tras recibir el alta por estabilización lesional figure en los
informes médicos.
De ahí la importancia de que el
informe de rehabilitación recoja de manera clara que esas secuelas existen, desglosándolas en caso de ser varias, puesto
que se valoran por separado y se reclaman tantas como te hayan quedado.
No obstante, que las secuelas figuren en los informes médicos no es garantía de que la compañía las pague.
Normalmente, van a negarlas sistemáticamente cuando los daños han sido más leves, sobre todo si se trata de esguinces o latigazos cervicales.
Otro problema es la valoración del
“dolor” como secuela, porque se trata de una manifestación “subjetiva” del
lesionado. Dicho de otro modo, la aseguradora puede “creerse o no” que nos ha
quedado un dolor permanente que antes no teníamos.
Sin embargo, el propio Baremo
de Tráfico recoge en forma de “algias postraumáticas” las secuelas derivadas
del dolor, por lo que deben reclamarse a la compañía.
Para asegurarte de que te paguen las secuelas que te queden cuando
acabes la rehabilitación y te den el alta médica vas a necesitar ayuda legal.
No solo para demostrar su existencia, sino también para reclamarlas a la
aseguradora.
AYUDA LEGAL DE UN ABOGADO PARA RECLAMAR LA
INDEMNIZACION
Las indemnizaciones dependen de
las lesiones sufridas, del tiempo que tarde la víctima en recuperarse, de las
secuelas que le queden, y otra serie de conceptos incluidos en el Baremo de
Tráfico.
Si eres un perjudicado está siempre en posición de inferioridad: no te dan información, no conoces los documentos que te hacen falta ni los plazos, no sabes cómo se interpreta el Baremo de Tráfico, y tampoco conoces cómo hacer el cálculo de la indemnización.



Esto significa que, a menos que
estés bien asesorado legalmente con un
abogado especialista que negocie en tu nombre y defienda tus derechos
frente a la aseguradora, ésta te va a ofrecer una oferta indemnizatoria mucho
menor de la que te corresponde.
En DEMANDA TU LESION sabemos por experiencia que las compañías de seguro no regalan nada.
Y nos importa, sobre todo, tu recuperación. Por eso nos ocupamos de todo lo demás, para que estés asesorado desde el principio y te centres en curarte de la mejor manera posible.
¿Has sufrido un accidente de
circulación con secuelas? ¿No sabes dónde acudir a hacer rehabilitación? ¿Necesitas
asesoramiento legal?
Contacta con DEMANDA TU LESION
y nuestros abogados te facilitarán en una primera consulta gratuita y sin
compromiso toda la información que necesitas
para reclamar con garantías los daños que hayas tenido.